martes, 22 de junio de 2010

Las formas de gobierno a la luz de la doctrina social de la Iglesia - Apéndice III del Libro de la Nobleza

Coronación de Carlomagno como Sacro Emperador por el Papa
(Nota: el Apéndice III del Libro de la Nobleza que comenzamos a publicar es ilustrado por una vista del interior de la Basílica de San Pedro, con la imagen del Príncipe de los Apóstoles y primer Papa en su trono)

"Nobleza y élites tradicionales análogas - en las alocuciones de Pío XII al Patriciado y a la Nobleza romana", por Plinio Corrêa de Oliveira

Apéndice III
Las formas de gobierno a la luz de la doctrina social de la Iglesia:
en teoría – en concreto
A – Textos pontificios y de otros autores
sobre las formas de gobierno:
Monarquía, aristocracia y democracia


1. El régimen monárquico es la mejor forma de gobierno

De la alocución de Pío VI al Consistorio secreto del 17 de junio de 1793 a propósito de la ejecución de Luis XVI:
“Esta [la Convención], en efecto, una vez abolida la forma de gobierno monárquica, que es la mejor, había colocado todo el poder público en las manos del pueblo”. 1
. . . . .
1) Pii VI Pont. Max. Acta, vol. II, p. 17

2. La Iglesia no desaprueba ninguna forma de gobierno
que sea justa y garantice eficazmente el bien común

De la encíclica Diuturnum illud (29/6/1881), de León XIII:
“No se ha procurado estudiar aquí las diversas formas de gobierno, pues no hay razón para que la Iglesia desapruebe el gobierno de un solo hombre o de muchos, siempre que sea justo y esté dirigido al bien común. Por tanto, salvaguardada la justicia, no les está prohibido a los pueblos adoptar aquel sistema de gobierno que esté más de acuerdo con su propia índole o bien con las instituciones y costumbres de sus mayores.” 1

De la encíclica Immortale Dei (1.11.1885), también de León XIII:
“La soberanía, en sí, no está necesariamente vinculada a ninguna forma de gobierno. Puede adoptarse lícitamente una u otra, con tal que ésta garantice eficazmente el bien común y la utilidad de todos (…)
“Si se quiere juzgar rectamente, ninguna de las diversas formas de gobierno es en sí misma censurable, pues nada contienen que se oponga a la doctrina católica y, si son practicadas con prudencia y justicia, todas ellas pueden mantener a la sociedad en perfecto estado.” 2

[Comentario del Dr. Plinio Corrêa de Oliveira]

En los textos transcriptos, León XIII supone el caso de una nación cuyos habitantes se encuentren en la contingencia de tener que elegir entre la vigente forma de gobierno u otra nueva, sin que haya habido violación del principio de autoridad ni de derechos adquiridos.

Las enseñanzas aquí impartidas se aplican también, mutatis mutandis, a una persona que se vea obligada a hacer una opción semejante en cuanto mero particular, por ejemplo, al depositar su voto en un plebiscito convocado para optar entre monarquía, república aristocrática o república democrática, o al elegir un partido político al que afiliarse.
1
) ASS XIV [1881] 5.
2) ASS XVIII [1885] 162, 174.

Comentario de Pelayo

Nos alegramos de retomar la publicación de esta nobilísima y estratégica obra del Dr. Plinio Corrêa de Oliveira, que abre inmensos y luminosos horizontes en el cielo oscurecido por las ideas, doctrinas y prácticas de la Revolución gnóstica e igualitaria mundial. La que intenta hacer creer a la mayoría de los hombres que no hay otra forma de gobierno que la basada en el sufragio universal, la demagogia y la masificación.

El Apéndice III , que hoy presentamos, es una formidable exposición de textos pontificios y teológicos de la mayor importancia, que revela las insanables falencias de las ideas, praxis y estilos de la falsa democracia revolucionaria, como también la sabiduría, equilibrio y excelencia de las formas de gobierno nacidas de los principios del Evangelio, aplicados en concreto por la Cristiandad y explicitados por los Sumos Pontífices y Santo Tomás. En el texto inicial, queda claro que, para la Iglesia, la forma de gobierno monárquica es la mejor. Iremos viendo por qué y en qué condiciones, pues la monarquía orgánica o atemperada, expuesta con sabiduría por Santo Tomás de Aquino, es muy diferente de su deformación -el absolutismo- que preparó los sistemas de agobiante estatismo vigentes. Quedamos a su disposición para cualquier comentario, duda o sugerencia. Cordialmente, en Cristo Rey y María Reina,

Pelayo

donpelayodeasturias@gmail.com